El Partido
Obrero se hizo presente en el Primer Foro Regional de discusión del proyecto de
Ley de la Verdad (*), en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad
Nacional del Centro, en Olavarría.
Los
dirigentes del Partido Obrero de Azul Jorge Moreno y Luz Ramallo, candidatos
del Frente de Izquierda - a concejal en esa ciudad y a senadora provincial por
la séptima-, que militaron durante muchos años en derechos humanos, intervinieron
en la jornada organizada por los autores del anteproyecto, todos ellos de las
filas kirchneristas.
Frente a un
público conformado fundamentalmente por alumnos, profesores y autoridades de la facultad y referentes de
organizaciones de derechos humanos de la ciudad y la zona, identificado con el
gobierno nacional, Jorge Moreno ocupó el
estrado desde el cual contestó a los expositores que exaltaron a Néstor
Kirchner y a Cristina como los abanderados de la causa de los desaparecidos y,
dirigiéndose al público -al que advirtió que estaba allí como militante del
Partido Obrero-, resaltó que la necesidad de militar un proyecto como el que
ponían a debate –los oradores que lo precedieron hicieron mucho hincapié en la
necesidad de militarlo- era la prueba contundente de que la década no había
sido ganada tampoco para esta larga lucha
que, dijo, no puede serle expropiada por el oficialismo a las organizaciones
que la vienen sosteniendo desde la época de la dictadura.
Después de
observar que el estado no ha asumido la tarea a la que estuvo obligado, de
perseguir en serio a los represores, apropiadores y genocidas, Moreno advirtió que el delito de apropiación
se siguió consumando en todos los años que siguieron al acto de apropiación y
todavía se sigue perpetrando. En este sentido, explicó que el estado tiene
obligación de intervenir también para detener la comisión de ese crimen, sobre
lo que el gobierno no profundizó sus políticas. En cambio, siguió,
está intentando trasladar el Banco Nacional de Datos Genéticos del Hospital
Durand para colocarlo bajo la órbita del Ministerio de Ciencia y desde allí,
ponerlo al servicio de los intereses de los laboratorios privados. Pero,
además, remarcó, se ha restringido su uso ¡y por ley! al caso de los hijos de
desaparecidos nacidos en cautiverio antes del
´83 y deja sin amparo a un vasto universo de casos similares
ocurridos en democracia .
Moreno
también recordó que en un acto en la ESMA –del que irónicamente surgió un Cabandié oficialista-, desde otra agrupación de HIJOS le reclamaron públicamente a Néstor Kirchner, por entonces presidente, la apertura de
los archivos oficiales, en procura de la verdad, reclamo que nunca fue
atendido.
Para
cerrar, Moreno sintetizó que en la década kirchnerista, el estado delegó en organizaciones no
gubernamentales de derechos humanos, específicamente -en este tema- en las
Abuelas, la tarea de perseguir a los apropiadores a través de la búsqueda de
sus nietos, desligándose de esa forma de una función que le era propia.
La
intervención de Moreno arrancó el aplauso de la concurrencia en pleno.
(*) El
anteproyecto que se empezó a poner a debate versa sobre la obtención –se
discute si voluntaria u obligatoria- de muestras de ADN en población nacida en el período que comprendió la última dictadura, para cotejo con el material que conserva el
BNDG.
3 comentarios:
IMPRESIONANTE... Esos son los tribunos de los que habla el viejo...
cualquiera ese viejo era juez en la dictadura amigo de represores, moreno caradura no tecree nadie.
Qué decepción, Anónimo. Buscale por otro lado, porque el Dr. Moreno fue designado Juez en democracia.
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