Las organizaciones más grandes del movimiento en nuestro país se han convertido en dependencias estatales y las reivindicaciones sólo llegarán con la transformación del régimen social - Llamó a integrarse a la agrupación LGBTI 1969 y a votar en Octubre al Frente de Izquierda -
La periodista y escritora azuleña Elva Gratas Abot, primer matrimonio igualitario de mujeres en la Provincia y segundo en el país, dio una charla en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional del Centro -UNICEN- en Olavarría, organizada por el Frente x Sociales, agrupación estudiantil de izquierda que hoy integra el Centro de Estudiantes de la Facso.
Luego de su intervención y en el marco de una nutrida concurrencia estudiantil, Elva dialogó mano a mano con los jóvenes, quienes intervinieron con gran entusiasmo. Luego de resumir su historia personal, atravesada por represiones, censuras, miedos y silencios, les contó a los chicos cómo construyó una familia homoparental, junto a Luisa y sus tres hijas.
Explicó cómo se involucró con quien fue su cónyuge en la lucha por la sanción de la ley de matrimonio igualitario y que la manera de hacerlo fue persiguiendo del Estado por amparo la autorización para casarse, en la ciudad de Azul. Junto a Luisa, entendieron que era la forma de sumar presión a los legisladores, en lo que fue una gran cruzada de amparos en todo el país. Y lo lograron. Siguió diciendo:
La realidad siempre supera a las leyes. La lucha que en
distintos países del mundo libró la comunidad homosexual marcó las presentes
conquistas.
Desde el Partido Obrero se visualizan los diferentes aspectos
que hacen a la lucha de los trabajadores, a través de las distintas asambleas
llevadas a cabo en todo el país, allí las voces de hombres y mujeres se hacen
oír en sus reclamos; y desde allí nacen los programas que proponen las soluciones.
El Plenario de trabajadoras del PO hace oír sus reclamos de “a
igual trabajo igual remuneración” y aspiran a que en el futuro estén dadas las
condiciones para que las oportunidades de estudiar y trabajar sean factibles
para las madres adolescentes, para que en los lugares de trabajo o de estudio
existan guarderías infantiles y se les posibilite ascender en el mejoramiento
de las condiciones económicas a través de las distintas disciplinas.
Se ha creado la Agrupación LGBTI 1969 –Partido Obrero más Independientes-,
recordando el año histórico en que el movimiento de LGBTI hizo frente a la feroz
represión policial efectuada a un bar gay del barrio de Greengwich Village
(Nueva York), que marcó un ícono en el mundo del flamear de la Bandera del
Orgullo Gay.
Y esta agrupación independiente nace a raíz de que las
organizaciones más grandes del movimiento en nuestro país se han convertido en
dependencias estatales y las reivindicaciones sólo llegarán con la transformación
del régimen social y con la custodia de organizaciones no comprometidas con el
gobierno de turno.
La aprobación de la Ley de Matrimonio Igualitario (Ley 26618) en
nuestro país, surge de los continuos reclamos de las agrupaciones homosexuales.
La presión de la comunidad se ve reflejada en las alocuciones de nuestros
legisladores. Aquel 15 de julio del año 2010 fue histórico al sancionarse la
Ley 26618 que fue promulgada el día 20.
Tenemos la ley, tenemos el derecho. Ya no somos “los diferentes”
somos iguales ante la ley y aquí surge la pregunta: “¿Es la igualdad legal la
igualdad real?” Lamentablemente no.
Debemos exigir a nuestros gobernantes que además de las leyes de
matrimonio igualitario y de identidad de
género, nos provean de políticas específicas que nos resguarden de injusticias.
Necesitamos políticas de inclusión laboral para la comunidad
homosexual, en especial para las compañeras/os trans y travestis que son
sometidos/as a vejámenes y a explotación y perseguidos/as por la policía, el
aparato represor está intacto.
Una persona trans hoy tiene una esperanza de vida de 35 años.
Ellos tienen derecho a vivir de acuerdo a lo que sienten y para ello debe estar
en plena vigencia la aplicación de la ley de identidad de género, garantizando
el acceso a tratamientos quirúrgicos y hormonales de cambio de sexo en forma
gratuita y en hospitales públicos.
Necesitamos una Ley de Educación Sexual Científica y Laica. Que
se enseñe en las escuelas el conocimiento de nuestros cuerpos sin tapujos y que
no sean sancionados los maestros que dictan dichas clases, como ocurrió hace
poco en la provincia de San Luis con la profesora de Lengua y Literatura en
Bellas Artes, Romina García Hermelo, sancionada durante 90 días sin goce de
sueldo por debatir con sus alumnos un libro con un personaje homosexual, el
libro en cuestión es de una escritora peruana y se llama “Hay una chica en mi
sopa”.
Debemos exigir la libre expresión de la identidad de género y
sexual (Ley 26743) en ámbitos laborales, educativos y de salud; exigir el desmantelamiento de las redes de tratas (Ley 26842); lograr la separación de la Iglesia del Estado. Esto es
fundamental para nuestro progreso en el conocimiento y en la aceptación de las
diferencias. Repito: “Educación sexual científica y laica”. Y separación de la
Iglesia del Estado.
Otro tema son los procedimientos de reproducción asistida que se
han venido haciendo desde hace más de tres décadas, en el marco
de la más absoluta indefensión con parejas que debían afrontar tratamientos
costosísimos. Ahora tenemos la Ley de Fertilización Asistida (Ley 26862); pero la ley omite la caracterización de la infertilidad como
enfermedad, algo que establece incluso la Organización Mundial de la Salud y
esta situación no ampara a las mujeres
que deben hacerse tratamiento en cuanto a licencias laborales; y deja en la
nebulosa la donación de óvulos, conservación de embriones, habilitaciones que
dependan del presupuesto público de salud; se teme y con razón largas esperas,
que pondrían en riesgo la efectividad de dichos tratamientos. Los tiempos de la
“máquina de impedir” estatal son mucho más lentos que los tiempos biológicos,
que conllevan a una disminución inexorable de las posibilidades reproductivas.
Indudablemente, son las agrupaciones independientes las convocadas a tener a su cargo una vigilancia permanente para lograr el cumplimiento de las
leyes beneficiando a las personas interesadas y a asumir el liderazgo de una lucha que debe profundizarse.
Felizmente, surgen voces de apoyo de quienes se comprometen en esta batalla. Tenemos el ejemplo del ex sacerdote cordobés. Respecto a la pregunta que se hace el Papa al contestar al
periodista: “si una persona es gay, ¿quién soy yo para juzgarla?” Es él el que
puede cambiar el significado que tienen los católicos de la homosexualidad, “como
desviación de la naturaleza” “o como una perversión; ”por lo que realmente es:
una orientación sexual. El como cabeza de la Iglesia es el que debe cambiar
políticas del vaticano. A este respecto Nicolás Alessio, el sacerdote cordobés
a quien la Iglesia Católica expulsó de su seno en abril de este año por apoyar
el Matrimonio Igualitario, le escribió una carta abierta al Papa Francisco y le
dice: “que pida perdón a la comunidad gay por los documentos eclesiales que
definen a la homosexualidad como “un desorden grave de la naturaleza” y añade:
“es urgente abandonar esta posición para no seguir siendo cómplices de la
violencia, de los prejuicios, el desprecio, el
maltrato, las agresiones, los insultos, los agravios, las exclusiones,
los abusos, contra las personas gays”
Han surgido grupos de varones antimachos, hacia la actual era
final del patriarcado, se agrupan para defender la igualdad de oportunidades,
el nuevo modelo de masculinidad y el final del rol social tradicional. “Ni
adelante ni atrás, al lado, a la par” así se definen desde su lugar de hombres
a favor de los derechos de las mujeres. “deseamos construir nuevos vínculos con
las compañeras” “el hombre tiene que ser más compañero, comprometido con el
otro” -afirman entre otros conceptos- “es un problema que el aborto sea ilegal.
Cientos de mujeres mueren por abortos clandestinos, se les niega la libertad de
qué hacer con sus cuerpos y los hombres tenemos que colaborar en esa lucha
porque también somos una parte involucrada”. La deconstrucción de los mandatos culturales y sociales lleva
tiempo y trabajo en conjunto, -manifiestan- y al respecto realizan charlas
abiertas, cursos y talleres.
Por la Ley del Nombre. En
Argentina la Ley del Nombre (18.248) señala en sus artículos 4 y 5 que el niño
debe tener el apellido de su padre, que el doble apellido es optativo y que el
orden es primero el del padre y luego el de la madre. Con la sanción de la Ley
de Matrimonio Igualitario se modificó el Art. 4 de la Ley del Nombre para
incluir a parejas de padres o madres del mismo sexo, para quienes el orden es
optativo, deben decidir las parejas y si no hay acuerdo se ordenarán los
apellidos alfabéticamente.
Recientemente tenemos el
caso de una pareja heterosexual que anotó a su bebé en la ciudad de La Plata
con el apellido materno en primer lugar y luego el apellido paterno, siendo
este el primer caso que acontece. Los padres de Manuel expresaron: “la decisión fue tomada acorde con
principios encaminados a una vida sin discriminaciones de ningún tipo, igualitaria
entre los géneros en todos los órdenes” y destacaron que “pretenden criar y educar a su hijo con los
valores de la libertad, la igualdad, la justicia y los derechos humanos”.
¡Bellísimo ejemplo! En este caso se necesitó una orden judicial, lo que se pide
es contar con una nueva ley por parte del Congreso Nacional que reconozca
directamente estos derechos.
En Córdoba los
legisladores del Frente de Izquierda y de los Trabajadores presentaron un
proyecto de inclusión laboral para personas trans, travestis y transgénero en
dicha provincia. Algo para imitar en todo el país.
El Partido Obrero en el Frente de Izquierda es el único partido político que tiene en sus bases los
lineamientos de las distintas voces surgidas de la clase trabajadora, de su juventud
y de las diversidades comunitarias, entre ellas la Agrupación 1969 de LGTBI y desde el Frente de Izquierda y de los Trabajadores convoca a la comunidad
homosexual y heterosexual a que voten a sus candidatos, para lograr suficientes
bancas en los Concejos Deliberantes y Legislaturas Provinciales y Nacionales, a
fin de que dichas bancas sean voces multiplicadoras en la defensa de los
derechos de la comunidad homosexual y de los trabajadores.
- Por un
salario mínimo equivalente a la canasta familiar, terminando con el trabajo en
negro, precario o tercerizado.
-
Por la
derogación del Impuesto al Salario.
-
Por el
82% móvil a los jubilados.
-
Por la
inserción laboral para los más débiles.
-
Por una
Educación sexual científica y laica
-
Por la libre
expresión de Identidad de Género y Sexual en ámbitos laborales, educativos y de
salud.
-
Por el
derecho al aborto. Anticonceptivos para no abortar. Aborto legal para no morir.
-
Por la
separación de la Iglesia del Estado.
-
Por un
gobierno de los trabajadores y del pueblo
Los invito a votar por el Frente de Izquierda y de los
Trabajadores!!!!
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