sábado, 25 de agosto de 2012

LA NACIÓN Y LA PROVINCIA SE TIRAN LA PELOTA MIENTRAS LA CIUDAD RESISTE LA TERCER INUNDACIÓN EN MENOS DE TRES MESES


QUE EL PUEBLO DELIBERE SIN PATRONES Y DISCUTA UN PROGRAMA DE EMERGENCIA FRENTE A LA CRISIS HÍDRICA

Después de tres inundaciones en tres meses en Azul, el Intendente Inza (FpV) trata de lavarse las manos con argumentos contradictorios. Por un lado, esgrime como causa el extraordinario volumen de precipitaciones y, por el otro, el ya gastado argumento  de las responsabilidades históricas de las administraciones municipales que lo antecedieron. El volumen de precipitación sólo desató una catástrofe anunciada que las administraciones previas ignoraron, como también lo hicieron los mismos funcionarios provinciales que acaban de dar una conferencia de prensa en la ciudad, y que pertenecen -como Inza- al FpV que gobierna la provincia y el país hace mas de 9 años.
Los azuleños tuvimos que escuchar a tres ministros provinciales –de Asuntos Agropecuarios, Arrieta; de Infraestructura, Arlía; y de Acción Social, Ferré- marcando la cancha; ya habíamos tenido que soportar las declaraciones del nacional de Planificación Federal, De Vido, haciendo lo propio. Todos ellos en un escenario de interna política brutal. Mientras el pueblo enfrentaba el pico de crecida en la ciudad, los ministros se tiraban el fardo unos a otros. No es casualidad que los enviados de Scioli hayan dado una conferencia de prensa en ausencia del intendente, que antes había hecho su proclama cristinista y en ese mismo momento se encontraba reunido con De Vido.
Inza metió en la misma bolsa al ex intendente Omar Duclós (Gen-FAP) y al gobernador Scioli, al destacar que la presa “La Isidora” –la obra de ingeniería que se reclama desde los ´80- ha estado incluida inútilmente en el presupuesto provincial y no ha sido suficientemente gestionada por su antecesor. Para rematarla, aseguró que será la presidencia de la Nación la que la haga posible. Previo a esto, la Provincia había prometido comenzar a ejecutarla en febrero del 2013, lo que fue ratificado por los ministros bonaerenses.
La presa “La Isidora” se ha convertido en la gran polémica. Aunque no lo diga, la Provincia no tiene fondos para realizarla; la Nación especula con esto y puentea al gobernador estableciendo un diálogo directo con el intendente (como hace con otros del palo k). Ni siquiera se tiene certeza de que ella sea una solución definitiva al problema –los expertos aseguran que no lo es-, pero el cristinismo quiere sacarle el jugo con la perspectiva de un año electoral, el 2013.
La indignación de los vecinos es el termómetro que mide el hartazgo. Las tres inundaciones que ya ha afrontado Azul en lo que va del año tomaron por sorpresa a un gobierno municipal absolutamente desenfocado que intentó reacomodarse de una instancia de crisis a otra a puro discurso. Uno de sus secretarios, el de Turismo, se cortó solo con un operativo de asistencia paralelo que montó desde la oficina de su área. Y a pesar de que el intendente lo desautorizó, el funcionario mantuvo su propio esquema  de ayuda, con independencia del comité de Defensa Civil bajo la dirección de su jefe político. Este fue uno de los indicadores más claros de la fractura interna del gabinete municipal, que se agrega como otro factor importante de la crisis política del oficialismo, reproducida a nivel local.
Las inundaciones en Azul pusieron a prueba las profundas fisuras de la gestión Inza y la incapacidad del gabinete para organizar la acción estatal frente a la emergencia. Pero también han sido la evidencia incontrastable de la desinversión pública durante muchos años, agravada por la presente crisis fiscal y la política de ajuste que venimos denunciando insistentemente desde el Partido Obrero.
Producto de esta emergencia, la bronca popular se expresa de distintas formas y busca organizarse para reclamar al Estado. La derecha y la cámara patronal quieren monopolizar la expresión popular para conducirla en función de su perspectiva de clase, convocando una manifestación con un único orador, un profesional del riñón del vecinalismo, en su momento con banca en el Concejo Deliberante. Nada tienen para ofrecer los que ya gobernaron Azul y defienden los mismos intereses sociales que postergan las obras públicas que necesitan las barriadas.
El Partido Obrero de Azul llama a manifestarse este domingo, a las 15:30 hs en el veredón municipal, y a hacerlo sin patrones. No queremos demagogos, necesitamos organizar la lucha y un programa de salida, incluidas las medidas de emergencia exigibles al estado.
El gobierno de la provincia ya anticipó en nuestra ciudad exenciones impositivas para el sector del campo –emergencia agropecuaria-, pero ninguna política de resarcimiento a los vecinos que han sido colocados en esta situación a consecuencia del comportamiento estatal omisivo y comisivo de muchos años. Ninguna exención a las grandes patronales y terratenientes, suficientemente beneficiados con una carga tributaria insignificante, que además evaden. Exenciones impositivas para los vecinos inundados, indemnización total a cargo del estado por los daños sufridos y asistencia integral para todos los afectados.
Partido Obrero de Azul.

No hay comentarios:

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...