Inza ajusta contra los asalariados
Sin recomposición salarial para los
trabajadores municipales, el presupuesto llegó con el tasazo que se suma al
impuestazo y tarifazo – la inflación justifica el aumento de las cargas
tributarias contra los asalariados, pero no de sus salarios – la réplica de la
política de sintonía fina
El proyecto
de ordenanza que propone la suba de las tasas municipales, en cuya ingeniería
jugó un papel central el camporista Néstor Requelme –Secretario de Hacienda-,
hombre de La graN maKro que fue traído a esta ciudad por el intendente de Azul,
José Inza (FpV), confirma lo que el Partido Obrero de Azul había anunciado
insistentemente.
.
La gestión
Inza llegaba con el propósito de ejecutar el plan de ajuste que el gobierno
nacional kirchnerista está imponiendo a las provincias y municipios: tasazo y
despidos. El propio intendente se encargó de disipar esos rumores y afirmó una
y otra vez que nada de eso sucedería. Sin embargo, ya dio el primer paso que viene
a desmentir esa prédica.
.
Requelme fue
traído para elaborar por estos lares la política de “sintonía fina”, cuya
ejecución y control también se reserva, y de paso tener la oportunidad de extender
el poder de camarilla que asegure el fortalecimiento del cristinismo, en un
territorio donde pugnan distintas fuerzas internas del PJ.
.
Simultáneamente
a resultar elegido para conducir los destinos de la Municipalidad de Azul, Inza
se abrió camino con el discurso que le permitiera justificar a corto plazo el
paquete de medidas antipopulares. Y lo hizo en línea con otros intendentes
electos que cumplieron a rajatabla ese mandato: insistir en la idea del
descalabro económico de las comunas, en aquellas que recuperaba el
kirchnerismo, y hacerlo con absoluta descontextualización de Nación y Provincia,
para reducirlo a la exclusiva responsabilidad política de las anteriores
gestiones locales, como si nada estuviera liado.
.
Inza habló desde
primera hora de una planta de personal sobredimensionada. Pero simultáneamente
multiplicó el plantel político. Una relación de tres a cuatro funcionarios por
cada uno que se retiraba es a esta altura la ecuación más firme de la forma
bajo la cual constituyó su gabinete. No sólo eso. También se conocen
designaciones en niveles inferiores, entre los cuales aparecen “premiados” por
su hazaña los que perpetraron el ataque contra los militantes del Partido
Obrero. Sin embargo, se cuidan de informar únicamente los nombramientos en los
puestos más altos.
.
Con ese
armado conformó a todos los sectores internos y lo hizo aún a riesgo de las profundas
contradicciones que traería aparejada su integración. Síntoma de ese problema
fue la escisión que a nivel local planteó el progresismo entrista liderado por
Miguel Mugueta, quien junto a sus seguidores se reservó sólo la defensa del
proyecto nacional de Cristina.
.
El ajuste
.
La misma fuerza política que votó contra el
presupuesto municipal en Tandil se prepara aquí en Azul –también en Olavarría- para
aprobarlo. Ambos contienen subas de tasas similares y afrontan problemas
comunes que, a diferencia de lo que sucede en nuestro pago, donde los
kirchneristas lo impulsan, allá justifican su voto negativo. Uno de los
argumentos de la bancada del Frente para la Victoria para rechazar en Tandil el
presupuesto elevado por el intendente radical Miguel Angel Lunghi fue la
insuficiencia de los fondos previstos –de 6 millones de pesos-- para satisfacer la demanda de aumento salarial
de los municipales –del 30 por ciento-. En nuestra ciudad, el Ejecutivo
presentó el presupuesto sin mención pública específica sobre el particular, que
en cambio se ha esforzado en remarcar como problema, a propósito del plantel sobredimensionado
y del personal que calificó de improductivo y sin estímulo.
.
El Sindicato
de Trabajadores Municipales de Azul –STMA- que lidera Omar Varela –condenado en
dos instancias por delitos cometidos en función gremial, sentencia que deberá
revisar ahora la Corte- salió a la superficie como colaborador de la gestión de
Inza. Así se presentó públicamente. En lugar de exigir la recomposición
salarial de las remuneraciones que el propio intendente ha reconocido
excesivamente bajas le concedió al jefe comunal un plazo de seis meses para reacomodar
la situación económica de la Comuna y sólo pidió la suma de 500 pesos para ese
período. Seguramente, lo hizo unilateralmente y sin consulta previa a las
bases.
.
En cambio,el
SOEMPA, de la mano de Rubén Rodríguez y Miguel Burgos, otrora socios del
saliente Duclós, hicieron su presentación en escena con la exigencia del 30 por
ciento de aumento.
.
Varela
aseguró que para el 30 de diciembre Inza anunciaría una suba salarial que sin
embargo no se produjo. Tampoco los gremios se preocuparon por conocer los fondos
reservados en el presupuesto a esos fines o al menos no lo expresaron
públicamente. Y no se movilizaron hasta el Concejo Deliberante, a la sesión del
último de Diciembre a la que ingresó, prácticamente a última hora y en medio de
una serie de desprolijidades formales, el presupuesto, que debe preverlos para este año.
.
La
sintonía fina
.
Lo de Río
Negro y Santa Cruz son indicadores claros de la política cristinista en esta
nueva etapa. En la primera de esas provincias se puso a disponibilidad a la
totalidad de los empleados públicos. 20.000 trabajadores bajo la lupa de un
poder que se reserva la facultad de hacer con ellos lo que quiera –cesantearlos,
reubicarlos, etc.-. Tamaña arbitrariedad. Y lo hace el Frente para la Victoria.
En Santa Cruz, fue el propio kirchnerismo el que planificó el paquete de
medidas del que luego intentó desprenderse, ante la magnitud de la movilización
social, reprimida ferozmente.
.
En la municipalidad
de Capitán Bermudez (Santa Fe), también la emergencia económica y financiera propuesta por el Ejecutivo crea
un estado de excepción, que fue denunciado por el Partido obrero (Ver en Prensa Obrera), a través de la banca obrera y socialista
que ocupa Jorgelina Signa, quien rechazó el plan de ajuste para esa comuna.
.
Es en ese
contexto específico en el cual debe leerse la política de José Inza. Un gobierno
nacional que le pone techo a las paritarias, convierte el derecho de huelga en
delito, libera el precio de los servicios públicos esenciales, firma el decreto
que prorroga el plazo de reducción de las contribuciones patronales a
empleadores y refunda la ley que le permitirá a él y a los futuros gobiernos
tratar como terrorista al pueblo que lo enfrente; una Provincia que aplica su
propio impuestazo, que no contempla fondos en su presupuesto para el incremento de los
salarios de los empleados públicos; una
ley penal tributaria que establece sanciones penales para quienes no paguen los
impuestos al fisco nacional, provincial y municipal (ciudad autónoma de Buenos
Aires); y podríamos seguir. En resumen, un Estado que lo pretende todo del
pueblo asalariado.
.
Veamos los
aumentos que propone el intendente de Azul: un 25 por ciento para la Tasa
urbana; 35, la vial; entre el 25 y 30, Marcas y Señales; 30, Derecho de
Explotación de Canteras y 26, por su Explotación; y 25, Inspección, Seguridad e
Higiene.
.
Esa
composición no explica una política popular y progresiva. Un funcionario
municipal revelaba días atrás que el sector rural abona una tasa equivalente al
precio de dos kilos de carne por hectárea, un productor que ya se encuentra beneficiado
por un impuesto rural calculado sobre el valor de una hectárea subvaluada. Es
imprescindible, seguía diciendo el mismo funcionario, elevar esa tasa. Sin
embargo, a través de Requelme Inza escogió más de lo mismo. Capitalismo en serio.
.
La tasa
urbana golpea directamente al trabajador, activo y pasivo. Al mismo tiempo que
el gobierno le niega un aumento salarial acorde a los índices inflacionarios, le
sube los impuestos, las tarifas de servicios públicos esenciales y también las
tasas municipales. Una clara política de mayor expropiación. La depreciación
constante del salario, agravada por el mantenimiento del mínimo del impuesto a
las ganancias y el IVA al consumidor.
.
El sector
rural, en cambio, como rama de la producción, ha sido uno de los grandes
beneficiarios de la política kirchnerista. Los niveles de ganancia han sido
estupendos. Así y todo, el inmobiliario rural está calculado, como dijimos, por
un valor de la tierra que no se corresponde con la tasación de mercado. Es
sensiblemente inferior a ella y sigue contribuyendo
a un impuesto insignificante.
.
Con sólo
analizar los beneficios que han alcanzado a los sectores mineros, industriales,
rurales y financieros, se tendrá conciencia del lugar que ocupan los
trabajadores en la preocupación gubernamental,.
En estos pagos,
Inza no es más que la síntesis de todas esas cosas. Como lo dijimos en una anterior
columna, capitalismo en serio.
.
La
impotencia es la ley natural de la administración, se ha dicho. La manera con
la que el intendente José Inza satisfizo la exigencia de todos los sectores
internos que contribuyeron a su victoria es un camino profundo hacia el Estado
burocrático en el que se hacen fuertes los fines del burócrata. Con sus
declaraciones públicas, Hernán Bertellys firmó el gran manifiesto de la
naturaleza de este rostro estatal que ningún periodista analiza.
Designado en
un cargo afín a sus negocios privados, no desmintió su interés particular.
Reconoció que le debe dinero al Municipio, anticipó que se tomaría facilidades
para saldar esa deuda y afirmó sin pudor alguno que dispondrá de los dineros
públicos en beneficio de la organización que lidera su esposa, pero que conduce
él mismo, en su provecho.
.
Y todo eso lo
dijo sin que le costara su calidad de funcionario público. A pesar de que el
diario digital El Diario de Azul (http://www.eldiariodeazul.com/?p=13408) lo mantuviera en portada durante casi
una semana.
.
El Estado y
propiedad privada están íntimamente ligados, pero ¿qué propiedad?
No hay comentarios:
Publicar un comentario